El viento roza mi rostro con los besos que carga de lejos. El beso de aquellos que se levantan deseando un mundo mejor y que con mis letras trato de comprender y plasmar tanta inquietud.
El aire fresco de la tarde, el agua clara, la naturaleza que poco a poco anuncia la primavera, todo es limpio, todo es sano, no hay maldad en ello, los animales pastan conservando la distancia prudente por su instinto, solo el hombre desea usar todo a su favor, explotar, vender, comerciar, atesorar, sin llenarse nunca, sin hallar satisfacción en ello, voltea y revisa si algo quedó algo olvidado, aún sobre su lecho de muerte.
¡Qué absurdo mundo hemos creado!
El planeta se revuelve, nos da muchas señales de insatisfacción.
Algún día pagaremos el precio de nuestra insensatez y frivolidad. Nuestro desprecio por todo, pensando que nunca dejará de existir.
Y entonces, el aire, dejará de tocar mi cara con besos traídos quien sabe donde.
A.R. Barrios
El aire fresco de la tarde, el agua clara, la naturaleza que poco a poco anuncia la primavera, todo es limpio, todo es sano, no hay maldad en ello, los animales pastan conservando la distancia prudente por su instinto, solo el hombre desea usar todo a su favor, explotar, vender, comerciar, atesorar, sin llenarse nunca, sin hallar satisfacción en ello, voltea y revisa si algo quedó algo olvidado, aún sobre su lecho de muerte.
¡Qué absurdo mundo hemos creado!
El planeta se revuelve, nos da muchas señales de insatisfacción.
Algún día pagaremos el precio de nuestra insensatez y frivolidad. Nuestro desprecio por todo, pensando que nunca dejará de existir.
Y entonces, el aire, dejará de tocar mi cara con besos traídos quien sabe donde.
A.R. Barrios
Veracruz, Ver. 12 de marzo del 2018
No hay comentarios:
Publicar un comentario