ELENA

     Ayer cumplí años, llegué bien madreado a 69. 

    Jamás pensé que llegaría a tanto.

    He realizado muchas cosas y siempre han sido sueños logrados.

    Ayer trabajé, hice unas tablas para asador que hoy entregaré.

    Pensé en ti.

    Me senté en mi sillón que tengo en el patio. Estuve observando las nubes viajeras. Unas con forma de animales, otras con formas de frutas, otras me parecieron a tu rostro o la forma en que tú cabello cae sobre tu espalda. ¡Una me miró!

    Me trajo un mensaje tuyo.

    Me dijo... ¡no te rindas!

    Enmedio de tanta desazón. Tristezas acumuladas, días de zozobra, noches de insomnio. Llegas tu.

    Dulcificas mi pensamiento. Mis deseos suaves, besos que quiero darte.

    Fuiste la última mujer en mi vida. Última con quién hice el amor.

    No me importa si fue un día, una hora, un minuto, fue una entrega limpia, amorosa, abrazado con ternura. Ese cuadro de ti, sentada en la cama, platicando desnuda, desnudando tu alma, desnudando la mía. Querer ser más.

    Me cambia la vida pensar en ti.

    Aunque confieso que cada día la depresión me lleva a caminar por el borde final del precipicio. No hallar solución o escapatoria, sentido a continuar, me revuelvo en pensar, pensar y pensar sin encontrar la solución.

    ¿Cómo?

    Imploro, suplico. Debe haber alguna forma de salir victorioso.

    Y ser abrazado por el amor

    Tú amor.

A. R. Barrios

El Texar Station County, Medellín de Bravo, Veracruz.

Noviembre de 2022