Son las 3:30 A.M. de un día cualquiera.
Bruce se desliza de la cama sin hacer el menor ruido, no desea despertar a Mary, su esposa, se pone las pantuflas y se dirige al baño para asearse, se viste y luego toma un café, ya dispuesto por Mary desde la noche anterior.
Bien abrigado pues apenas inicia el invierno, son los primeros días en Vancouver y el frío se hace presente bajando desde las montañas, ya nevadas, enciende su camión. Ritual de 15 minutos para poner a tono el motor y dirigirse a un nuevo día de labores, donde entrega mercancías a domicilio de tiendas comerciales de la ciudad. No posee ayudantes, el carga y descarga, su camión el cual posee una rampa hidráulica para facilitar su operación y maniobras.
Son las 7:15 de la misma mañana. Mary se levanta, ordena rápidamente la cama, se dispone a asearse, toma un baño caliente, después de haberlo pensado mucho, el frío cala aún con calefacción. La cuenta del gas no demora en llegar y la del agua también. Nunca van a un banco a pagar estos servicios, les cargan directamente a su cuenta y solo ven el cargo cuando el estado de cuenta llega cada mes. O bien lo consultan por Internet.
Toma un café, una pieza de pan, se sienta un instante pero no demora ni dos minutos cuando se levanta como autómata para dirigirse a la habitación de su hijo Rene, lo mueve y le indica que debe levantarse para ir a la escuela. De inmediato se dirige a la habitación de al lado y despierta a Karly su hija menor para vestirle. Karly aún duerme, es un bebe.
Mary debe entrar al trabajo a las 9.00 a.m. y Karly será su compañía casi todo el día. Trabaja como cuidadora de niños autistas. Ha tenido que guardar su titulo de doctora en odontología por huir de su primer esposo, quien le amenazó con quitarle al hijo y demás amenazas que hicieron que esta noble mujer pusiera tierra de por medio.
El Estado le asigna el cuidado de uno de ellos, el sueldo no es mucho pero es mejor que ser "Janitor" ahora ya con papeles de residencia legalizados. Muchos latinos, en especial mexicanos llegan de ilegales a este país y de inmediato trabajan como ayudantes de limpieza (Janitor). Suena rimbombante pero no es más que eso. Lavar baños, limpiar casas, recoger basura y sufrir acoso de los dueños en el caso de las mujeres. Mala paga, jornadas extensas de trabajo. Si corren con suerte, el cliente es soltero y se casa con ellas, con tal de tener los documentos que les hagan legales en su residencia.
En Canadá es casi imposible trabajar sin la residencia legal (landing inmigrant)
Así transcurre el día, Bruce viaja hacia las grandes bodegas donde llena su camión de mercancías que tendrá que entregar ya con un itinerario establecido y Mary correrá para dejar a su hijo Rene en la escuela, ir por David (el niño autista) a su casa, meter a Karly al auto y cuidar a ambos hasta el mediodía que debe entregar a David a su madre (misma que ha estado trabajando para sostener a David) El Gobierno le provee el costo de los cuidados por ser un niño especial.
Son las 15:00 horas. Mary toma un descanso, come lo que encuentra o bien asiste a un buffet donde a base de un bajo costo y completando con cupones, paga la comida del día, algunas veces asiste al "Salvation Army" los miércoles donde la comida es gratis. Una forma de ayuda, desinteresada de esta organización, aunque el fondo religioso es el costo.
A las 16.00 horas. Bruce llega a casa después de doce horas de trabajo, cansado se refugia en el sótano (basement) y ahí dispone de un refrigerador lleno de cervezas. Posee además un colección de vídeos en todos los formatos, Beta, VHS, CD, repara equipos de sonido y vídeo como hobby aunque se le cae algo de trabajo lo realiza. Consume una o dos cervezas, una caja de cigarros. Toma un baño antes de ir a la cama y le dan las 18.00 horas. cuando sus ojos se cierran, sin haber abrazado a su esposa. Solo en sueños.
Por su parte Mary, deja a Karly toda la tarde al cuidado de Bruce y a su hijo Rene haciendo sus tareas, ambos se dirigen a la cama antes de las 20.00 horas. mientras ella trabaja como chófer de camionetas o rampas móviles en el aeropuerto. Su conocimiento de manejo en vehículos estándar le permitió obtener este trabajo, ya que en Canadá todos son automáticos en su mayoría. Su licencia de manejo la pudo lograr luego de pasar examines rigurosos (sin mordidas ni trampas, ni mal servicio) de manejo y tres años para pasar de categoría, requisito ineludible para obtener dicho estatus.
Son las 2.00 horas. de la madrugada y Mary llega a su casa, dispuesta a dormir y no despertar a Bruce quien una hora después deberá marcharse a nuevo día de trabajo.
La doble jornada es común en Canadá, los sueldos son bajos, mínimos, y se hace necesario para que las cuentas puedan ser cubiertas. El sistema de esclavitud económica está disimulado y la gente acepta sin objetar su destino. Los días libres no solo son libres de trabajo, también lo son de sueldo pues no hay paga en tales días.
Mary yace al lado de Bruce, ambos extenuados del diario luchar por pagar cuentas.
Las cuentas de la energía eléctrica, la calefacción, el agua, la renta, el teléfono, el cable, Internet siguen su marcha, acompañadas por el reloj que marca tic, tac, tic, tac en la sala de su casa. Afuera el frío se hace intenso.
—Oye, ¿sabes como encuentran a los ilegales en Canadá?—me espeta Mary la pregunta.
—¡No, no lo sé!—.
—¡Congelados o muriéndose de frío, no traen abrigo para ello!—.
A.R.Barrios
Bruce se desliza de la cama sin hacer el menor ruido, no desea despertar a Mary, su esposa, se pone las pantuflas y se dirige al baño para asearse, se viste y luego toma un café, ya dispuesto por Mary desde la noche anterior.
Bien abrigado pues apenas inicia el invierno, son los primeros días en Vancouver y el frío se hace presente bajando desde las montañas, ya nevadas, enciende su camión. Ritual de 15 minutos para poner a tono el motor y dirigirse a un nuevo día de labores, donde entrega mercancías a domicilio de tiendas comerciales de la ciudad. No posee ayudantes, el carga y descarga, su camión el cual posee una rampa hidráulica para facilitar su operación y maniobras.
Son las 7:15 de la misma mañana. Mary se levanta, ordena rápidamente la cama, se dispone a asearse, toma un baño caliente, después de haberlo pensado mucho, el frío cala aún con calefacción. La cuenta del gas no demora en llegar y la del agua también. Nunca van a un banco a pagar estos servicios, les cargan directamente a su cuenta y solo ven el cargo cuando el estado de cuenta llega cada mes. O bien lo consultan por Internet.
Toma un café, una pieza de pan, se sienta un instante pero no demora ni dos minutos cuando se levanta como autómata para dirigirse a la habitación de su hijo Rene, lo mueve y le indica que debe levantarse para ir a la escuela. De inmediato se dirige a la habitación de al lado y despierta a Karly su hija menor para vestirle. Karly aún duerme, es un bebe.
Mary debe entrar al trabajo a las 9.00 a.m. y Karly será su compañía casi todo el día. Trabaja como cuidadora de niños autistas. Ha tenido que guardar su titulo de doctora en odontología por huir de su primer esposo, quien le amenazó con quitarle al hijo y demás amenazas que hicieron que esta noble mujer pusiera tierra de por medio.
El Estado le asigna el cuidado de uno de ellos, el sueldo no es mucho pero es mejor que ser "Janitor" ahora ya con papeles de residencia legalizados. Muchos latinos, en especial mexicanos llegan de ilegales a este país y de inmediato trabajan como ayudantes de limpieza (Janitor). Suena rimbombante pero no es más que eso. Lavar baños, limpiar casas, recoger basura y sufrir acoso de los dueños en el caso de las mujeres. Mala paga, jornadas extensas de trabajo. Si corren con suerte, el cliente es soltero y se casa con ellas, con tal de tener los documentos que les hagan legales en su residencia.
En Canadá es casi imposible trabajar sin la residencia legal (landing inmigrant)
Así transcurre el día, Bruce viaja hacia las grandes bodegas donde llena su camión de mercancías que tendrá que entregar ya con un itinerario establecido y Mary correrá para dejar a su hijo Rene en la escuela, ir por David (el niño autista) a su casa, meter a Karly al auto y cuidar a ambos hasta el mediodía que debe entregar a David a su madre (misma que ha estado trabajando para sostener a David) El Gobierno le provee el costo de los cuidados por ser un niño especial.
Son las 15:00 horas. Mary toma un descanso, come lo que encuentra o bien asiste a un buffet donde a base de un bajo costo y completando con cupones, paga la comida del día, algunas veces asiste al "Salvation Army" los miércoles donde la comida es gratis. Una forma de ayuda, desinteresada de esta organización, aunque el fondo religioso es el costo.
A las 16.00 horas. Bruce llega a casa después de doce horas de trabajo, cansado se refugia en el sótano (basement) y ahí dispone de un refrigerador lleno de cervezas. Posee además un colección de vídeos en todos los formatos, Beta, VHS, CD, repara equipos de sonido y vídeo como hobby aunque se le cae algo de trabajo lo realiza. Consume una o dos cervezas, una caja de cigarros. Toma un baño antes de ir a la cama y le dan las 18.00 horas. cuando sus ojos se cierran, sin haber abrazado a su esposa. Solo en sueños.
Por su parte Mary, deja a Karly toda la tarde al cuidado de Bruce y a su hijo Rene haciendo sus tareas, ambos se dirigen a la cama antes de las 20.00 horas. mientras ella trabaja como chófer de camionetas o rampas móviles en el aeropuerto. Su conocimiento de manejo en vehículos estándar le permitió obtener este trabajo, ya que en Canadá todos son automáticos en su mayoría. Su licencia de manejo la pudo lograr luego de pasar examines rigurosos (sin mordidas ni trampas, ni mal servicio) de manejo y tres años para pasar de categoría, requisito ineludible para obtener dicho estatus.
Son las 2.00 horas. de la madrugada y Mary llega a su casa, dispuesta a dormir y no despertar a Bruce quien una hora después deberá marcharse a nuevo día de trabajo.
La doble jornada es común en Canadá, los sueldos son bajos, mínimos, y se hace necesario para que las cuentas puedan ser cubiertas. El sistema de esclavitud económica está disimulado y la gente acepta sin objetar su destino. Los días libres no solo son libres de trabajo, también lo son de sueldo pues no hay paga en tales días.
Mary yace al lado de Bruce, ambos extenuados del diario luchar por pagar cuentas.
Las cuentas de la energía eléctrica, la calefacción, el agua, la renta, el teléfono, el cable, Internet siguen su marcha, acompañadas por el reloj que marca tic, tac, tic, tac en la sala de su casa. Afuera el frío se hace intenso.
—Oye, ¿sabes como encuentran a los ilegales en Canadá?—me espeta Mary la pregunta.
—¡No, no lo sé!—.
—¡Congelados o muriéndose de frío, no traen abrigo para ello!—.
A.R.Barrios
Veracruz, Ver. Enero del 2001
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